Empezamos nada mas y nada menos con uno de los
primeros anticonceptivos del que se tiene registro. Se trataba de una crema
hecha en 1850 años A.C, a base de miel y estiércol de cocodrilo, suponemos que
la miel era para darle un toque dulce… Era usada antes del coito por mujeres
egipcias a modo de espermaticida.
Si alguna mujer barajaba la posibilidad de estar embarazada, Sorano de
Éfeso les aconsejaba: Saltar siete veces, tan alto como pudieran. Nosotras nos
preguntamos: ¿cuál sería el límite?, ¿el techo?
Pero si algo no nos sorprende de Sorano de Éfeso era su gran imaginación e
ingenuidad. Éste recomendaba a las mujeres ponerse de cuclillas y estornudar
como método anticonceptivo después de una relación sexual. Pero… ¿Y si no
tenías ganas de estornudar?
Y dando un salto de
continente, las mujeres Africanas en la antigüedad con la idea
equivocada de que cualquier sustancia ácida podía servir como espermaticida,
usaban tela o pasto picado para mantener la sustancia ácida en su vagina y así
emplearla como anticonceptivo.
Siguiendo con la misma línea de espermaticidas, en el mediterráneo el papel
de bambú se impregnaba con limón y trozos de esponjas de mar y se introducía en
la vagina previo a la relación sexual. En Asia ocurría lo mismo, pero se hacía
con una sustancia ácida.
En el siglo XVI, se fabricaban y se usaban preservativos hechos nada más y
nada menos que con piel e intestinos de animales como un método para no
contraer sífilis. ¿Asqueroso verdad?, pero eso no es todo, debes saber que esos
“preservativos” eran REUTILIZABLES debido a su alto costo.
Gabriel Falloppio en 1564, describió un condón hecho de tela por primera
vez. Esto permitía que el costo del preservativo fuese inferior pero, siempre
hay un pero, dichos condones no eran impermeables.
A partir del proceso de vulcanización que patentó Charles
Goodyear en 1844 en adelante, permitió
crear condones de caucho, mucho más resistentes y elásticos. Sin embargo,
debido a las dificultades sociales que hubo para distribuirlos contribuyeron a
que su reutilización continuara por muchos años.
Desde
1940 se empezó a probar el uso de hormonas en pastillas como método
anticonceptivo (el que conocemos actualmente). En 1960 se aprobó el uso de
estas píldoras, que contenían cerca de cinco veces la dosis de estrógeno que
hay en las pastillas actuales. Sus efectos secundarios incluían coágulos de
sangre.
Después de hacer este breve repaso por la historia de los anticonceptivos, no cabe duda que la humanidad ha recurrido a su ingenio, creatividad e imaginación para poder prevenir en la mayoría de los casos embarazos no deseados.
Has podido comprobar que eran muy desagradables
comparándolos con los que hoy en día conocemos. Entonces, ¿cuál es tu excusa
para no protegerte?, ¿cuál es tu excusa para no usar un anticonceptivo?.
Bibliografia consultada:
De10, (2009): Los métodos anticonceptivos
mas raros de la historia. Recuperado el 15 de Marzo de 2014 de:
Blog AbortoMedico (2011): Sorano de Éfeso: padre de la
ginecología y obstetricia. Recuperado el 22 de Marzo de 2014 de: http://abortomed.blogspot.com.es/2011/11/sorano-de-efeso-padre-de-la-ginecologia.html
Goodyear, (2012): Historia de la marca. Recuperado el 24 de Marzo de 2014
de:
Blog Odisea, (2012): Historia
de los anticonceptivos. Recuperado el 22 de Marzo de 2014 de: http://www.blogodisea.com/2012/historia-de-los-anticonceptivos/cuerpo-humano/
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